Primer encuentro con la Asociación de Amigos de los
Jardines de la Oliva.
(pendiente de mejoras)
Autor de la cronica: Joaquín Caro Fdez.
Fotos de Rogan y Gaelo
Sevilla, 12 de
octubre de 2017.
Fecha escogida para celebrar el primer encuentro entre nuestra
Asociación y la de Amigos de los Jardines de la Oliva, aprovechando una visita
guiada organizada por esta asociación sevillana, a los árboles singulares que
se encuentran en el Parque de María Luisa.
La convocatoria la había realizado el presidente de la misma, Jacinto Martínez,
a través de Facebook, y pensamos que sería una buena ocasión para establecer un
encuentro hermanado y hablar de proyectos en común.
Después del desayuno en Jerez, salimos hacia Sevilla 13 componentes de nuestra
asociación, teniendo fijado el punto de encuentro, a las doce de la mañana, en
la glorieta de Bécquer, en el interior del parque.
Llegamos con tiempo
suficiente, y de hecho, a las 11:30, hicimos las presentaciones de rigor en la
mencionada glorieta.
Poco a poco fue llegando público, entre los que se
encontraba el coordinador del Gabinete Pedagógico del Museo de Bellas Artes de
Sevilla, D. Juan Luis Ravé Prieto, que actuaría como guía en las explicaciones
patrimoniales del Parque, y al que acompañaban dos jóvenes, que repartieron
gorras y unos pequeños libros editados en Noviembre de 2010, titulado Siglo XX,
sobre Jornadas Europeas de Patrimonio en Andalucía, entre los presentes.
Antes
de comenzar el recorrido, nos hicimos varias fotografías para el recuerdo en
este lugar tan significativo.
Pasadas las doce, comenzó Jacinto con unas palabras de agradecimiento por haber
acudido a este acto cultural, donde se hablaría de los árboles singulares del
parque, su historia y el patrimonio que atesora en los distintos rincones de
este maravilloso recinto.
Hablaría
seguidamente el Sr. Ravé, sobre la Historia del Parque en aspectos generales, y
luego centrándose en el monumento a Bécquer, el detalle de sus figuras y los
actos vandálicos a los que es sometido.
Este monumento rodea a un centenario
ejemplar de Taxodium (1850), que
según los expertos sevillanos es de la variedad distichum, y al parecer nuestro querido amigo y colaborador, investigador botánico Javier Fdez. de Bobadillas lo cataloga
como mucronatum.
Avanzamos sobre el itinerario previsto y nos
encontramos con un Ombú (Phytolacca dioica), ante el que nos
paramos unos instantes.
Continuamos bordeando un Arce negundo,
un Castaño de
indias,
una espléndida Araucaria
junto a un Ficus macrophylla, que
nos derivarían a la Glorieta de Luis Montoto,
con cipreses, yucas y cinamomos. Unos metros más adelante, la Glorieta
de Luca de Tena, utilizada como punto de lectura, donde localizamos unos júpiter, que ya no estaban floridos.
Nuestro deambular por este espléndido parque, nos llevó hasta la Av. Rodríguez
Caso, con sus magnolios, que puedan
datar de 1923.
Camino del monumento a Jean-Claude Nicolás Forestier, que
inauguró este parque en 1914, rozamos una Acacia
de tres espinas, cruzándonos con un Arbol
de las lianas y un ciclamor,
entre otros. Más adelante, la bonita Glorieta dedicada a Juanita Reina, junto a
la que estaba en Plátano de paseo de
1820.
Nuestros pasos nos llevaron a la zona del estanque, con fotinias, robinias, grevilleas, algarrobos, hasta la Glorieta de los
Montpensier.
Otros árboles a destacar, una Duranta
repens y un Tejo de más de 100
años. Seguimos avanzando hasta la Glorieta de Doña Sol, custodiada por un
magnífico ejemplar de Alcanforero,
de grandes dimensiones.
En un rincón cercano, un mediano Brachichito discolor, situado a unos metros de la valla que rodea
el parque.
La Glorieta de Ofelia Nieto, nos trasladaba a contemplar Ginkgos y catalpas,
Rozando el final de la visita hasta la Plaza de América, con sus jacarandas centenarias, traídas en 1923 por el Teniente Williams, rodeada de jaboneros chinos y ciclamores.
En esta
plaza acabaría la visita a los árboles singulares del Parque de María Luisa,
con palabras de D. Juan Luis Ravé y D. Jacinto Martínez. La visita fue seguida
por unas 70 personas, muy interesadas en descubrir estas variedades arbóreas,
unidas a otras especies que nos íbamos encontrando en esta pequeña ruta.
Desde allí, nos
trasladamos a un bar cercano a la Asociación sevillana, donde degustamos un
menú preparado, acompañados de excelente compañía, amenas charlas y risas,
conociendo de una manera más cercana, a los componentes de este grupo que lleva
tantos años de trabajo y estudio, por la preservación de la naturaleza.
Tras la comida,
nos fuimos a conocer las instalaciones ubicadas en la Bda. Jardines de la
Oliva, que comenzamos con una visita al vivero, donde nos enseñaron in situ,
los posibles árboles a donar el próximo 4 de Noviembre, para que escogiésemos
el ejemplar más adecuado.
Finalmente nos decidimos por el Brachichito rosa (Brachychiton discolor), junto al que nos hicimos algunas fotos. A pesar de no ser un recinto
muy grande, tienen gran variedad de especies, sobre las que trabajan y
estudian.
Luego pasamos al local de la Asociación, donde entablamos un rato de
charla, sobre sus actividades y proyectos en marcha, así como de la futura
visita a Jerez para el próximo mes.
Una
agradable jornada, donde hemos conocido personalmente a algunos de los miembros
de esta Asociación, valorando muy positivamente su trabajo y amor por la
naturaleza, que gracias a ellos y sus contactos, mantienen una apuesta firme en
la que el trabajo, la constancia y el esfuerzo, harán que nuestro patrimonio
arbóreo se preserve y se incremente día a día.
FIN DE LA ENTRADA