Cercis siliquastrum, árbol del amor
De hojas verdes acorazonadas
Con venosas ramas forradas de color
Formando racimos de flores blancas o rosadas
En calle Velazquez |
En calle Velazquez |
Sus frutos de semillas, como vainas de guisantes
se oscurecen con el tiempo y permanecen colgadas
Aguardando impacientes hasta el próximo año
Si en la estación otoñal no son desterradas
En los jardines de La Atalaya (Museo de Relojes) |
En la Avenida Alvaro Domecq |
También le conocen como árbol de Judas
La Biblia aprovecha el efecto llamada
Algarrobo loco, es otro de sus comunes
Puede que por sus controvertidas ramas floradas
En barriada La Constancia |
En el parque de La Union |
En los jardines de El Bosque |
De corteza débil, tiene como enemigo el viento
Se dobla con facilidad, inclinando su trazada
Acompaña la floración de almendros y cerezos
Anunciando una primavera de colorido cuajada
Jardines de La Atalaya |
Calles, jardines y parques de Jerez
Se visten de tonos rosados que alegran las miradas
Pablo Neruda con Bruselas,
Av. Rafa Verdú
Medianas cubiertas de figuras fucsias alineadas
El Altillo, Jardín Escénico, calle Velazquez
Rincones y plazas con tonalidades mezcladas
Parque Santa Teresa, Av. de Nazaret
Copas exuberantes asoman en las fincas privadas
Rincones y plazas con tonalidades mezcladas
Parque Santa Teresa, Av. de Nazaret
Copas exuberantes asoman en las fincas privadas
Jardín Escenico |
También entre viñedos, se perfilan nuevas
plantaciones
Magnífico el ejemplar de los jardines de la Atalaya
Otros contorsionistas, en el Bosque y Av. Chema Rodríguez
Haciendo equilibrios con sus figuras inclinadas
Magnífico el ejemplar de los jardines de la Atalaya
Otros contorsionistas, en el Bosque y Av. Chema Rodríguez
Haciendo equilibrios con sus figuras inclinadas
Con flores que forman pequeños gajos apiñados
Las ramas desnudas se van vistiendo alborozadas
Y mientras se ajustan el traje de primavera
Los pétalos que caen, cubren el suelo de belleza alfombrada
Joaquín Caro.
Y mientras se ajustan el traje de primavera
Los pétalos que caen, cubren el suelo de belleza alfombrada
Joaquín Caro.